El sábado 28 de Marzo nos juntamos un número bastante numeroso para hacer una ruta por los montes de Cantabria, en concreto nos juntamos 44 senderistas, algunos de ellos eran niños de unos 10 años, lo cual da un indicativo de la dificultad que tenía la ruta. Esta es la segunda ruta que organizo este curso escolar en el colegio en el cual trabajo.
La ruta por la cual nos decidimos en esta ocasión fue la que transcurre desde Saja a Tudanca, es decir parte del Valle de Saja-Besaya y finaliza en el Valle del Nansa. Nosotros ya habíamos realizado esta ruta con anterioridad, pero no en su totalidad, en el año 2009 (pinchar aquí) y para la preparación para esta ocasión la habíamos realizado el 7 de marzo, pero no pudimos hacerla en su totalidad por culpa de la nieve y para asegurarnos de poderla hacer el sábado, la hicimos un grupo de dos senderistas el día anterior a la definitiva.
Esta ruta es una de las ocho etapas del GR-71 (127 km.) es decir, el Sendero de la Reserva de Saja, el cual atraviesa de un extremo a otro la Reserva de Saja uniendo el pueblo de Bárcena de Pie de Concha, en el centro de Cantabria, con la localidad asturiana de Sotres, en el corazón de los Picos de Europa. La Reserva Nacional de Saja, con 1.800 km² de extensión, engloba todos los valles occidentales de Cantabria, desde el río Besaya hasta los Picos de Europa, sirviendo en cierta manera como preparque del Parque Nacional de los Picos de Europa.
Los valles y sierras de la Reserva de Saja se encuentran en un estado de conservación muy aceptable, con extensos hayedos y robledales en sus laderas, y hermosas brañas (pastos de verano) en las zonas altas, que sirven de pasto a la vaca tudanca, autóctona de Cantabria. Estos montes albergan una gran riqueza faunística, con ciervos, corzos, jabalíes, rebecos, lobos, numerosas rapaces… y dos especies muy escasas pero todavía presentes en algunos puntos de la Reserva de Saja: oso pardo y urogallo.
Para descargar el track para GPS desde Wikiloc pinchar aquí: (hay que registrarse en Wikiloc)
La ruta la iniciamos en el Centro de interpretación del Parque Natural Saja-Besaya, lugar donde el autobús tenía espacio suficiente para parar y poder dar la vuelta para poder irnos a recoger a nuestro destino final en el pueblo de Tudanca. Este centro de interpretación se ubica inmediatamente al sur de la localidad de Saja en el punto kilométrico 13 de la carretera autonómica 280 (Cabezón de la Sal –Reinosa), al comenzar la ascensión del puerto de Palombera, en el municipio de Los Tojos. Allí aprovechamos a hacernos una foto de grupo.
Una vez en este punto iniciamos un corto recorrido por la carretera que asciende hacia Palombera, al cabo de unos 500 metros nos encontramos en el punto denominado la Fuente de la Cueva del Poyo, y después de pasar un puente, nace una pista a mano derecha de la carretera que nos adentra en el majestuoso bosque de hayas y robles de Saja. En este punto encontramos un cartel indicador de la ruta y un poco más adelante, en la carretera principal hay un pequeño aparcamiento para poder dejar el coche.
En este punto empezamos a caminar por una pista ancha en la que está prohibida la circulación de vehículos. El camino es ligeramente ascendente y se va ganando altura. La pista atraviesa un gran hayedo, tal vez el mejor conservado de toda la Cornisa Cantábrica que, aunque en esta época no tiene hojas, tiene un gran encanto. Este El primer día que hicimos esta ruta para prepararla con mis dos amigos bonoruteros nos encontramos en uno de los primeros tramos una jabalí con tres jabatos, ya un poco creciditos que la seguían.
El camino se interna en el bosque y va ganando altura en sucesivas revueltas sin pérdida posible. Aunque hay alguna senda secundaria, debemos ignorarla. La pista atraviesa el hayedo, donde podemos observar, si ascendemos en silencio, cosa prácticamente imposible con un grupo de 44 personas, venados, jabalíes y corzos entre ejemplares de hayas con una altura de unos 40 metros. El día que fuimos a preparar la ruta observamos unas venadas entre las hayas.
El ascenso entre el hayedo es cómodo, pero al final, para la gente que no está acostumbrada a andar se le hizo un poco durillo. En total son seis kilómetros entre las hayas hasta llegar a la parte final de la subida, donde el hayedo clarea, dejando paso a acebos, espinos y saúcos, antes de llegar a las Brañas de Bucierca. En este último tramo nos encontramos algunas partes de la pista que todavía estaban cubiertas de nieve.
Al llegar al final del hayedo, en la braña de Bucierca, un pastizal donde el camino de bifurca, nos dirigimos hacia una estabulación de ganado para agrupar a los senderistas y descansar un poco de la subida.
Después de tomar un refrigerio volvimos a bajar a la pista principal para continuar por dicha pista en dirección hacia Tudanca.
Seguimos ascendiendo por esta pista, ya en muy ligero ascenso hasta encontrarnos con dos abrevaderos para el ganado que se encuentra justo al lado de la pista.
Siguiendo por la pista principal a nuestra izquierda vamos dejando las cimas del Cueto de la Concilla, La Concilla de Abajo y del Toral de Remallo. Nuestro siguiente punto de referencia es otro abrevadero que se encuentra justo después de unas marcas en unas estacas. Esta es el abrevadero del collado de Bralalengua (1.102 m,).
En este punto llega el punto más conflictivo de todo el camino, y más si nos aparece la niebla, tal y como nos ocurrió el día anterior, el cual sino hubiésemos tenido el móvil con el GPS nos habría costado encontrar el camino. Este punto es conflictivo porque en principio parece que la pista nos lleva en dirección a la Sierra de Peña Sagra y sin embargo lo que tenemos que hacer es dirigirnos hacia nuestra derecha siguiendo la pista que circula bordeando el Alto de la Jazona (1.147 m.) Aquí nos encontramos un problema, que ya habíamos detectado el día anterior, la pista que bordeaba este alto estaba cubierta por nieve y era bastante complicado atravesar este gran nevero. Por dicho motivo lo que hicimos fue ascender hacia el Alto de la Jazona para librar ese paso y volver a contactar con la pista principal.
Desde aquí había unas maravillosas vistas de la Sierra de Peña Sagra, en la que destacaba por encima el Cornón.
Una vez en el alto nos dirigimos hacia la pista la cual se encontraba unos metros más abajo.
Esta pista nos lleva hasta nuestro siguiente punto de reagrupamiento, en concreto el lugar donde íbamos a parar para comer y reponer fuerzas. Este lugar es conocido con el nombre de Braña de Carracedo o Collado de Carracedo, divisoria entre las cuencas del río Saja y del río Nansa y, donde existe una especie de redil para meter ganado junto al que paramos para comer.
Nada más acabar de comer empezamos a ver cómo se nos iba echando la niebla encima así que decidimos recoger y agruparnos para dirigirnos hacia una columna de piedra y un cartel señalizador.
Aquí, es donde comienza otra pista o camino forestal ancho y claro que nos conducirá en suave descenso a Tudanca. Esta pista, va dejando a nuestra derecha la cima del Cueto La Cahorra (1.189 m.). Más adelante, en el recorrido por la pista, aparece a nuestra izquierda lo que en la zona denominan «el Prau Conceju de Tudanca», enorme pradería de aprovechamiento comunal. Aquí se nos empezó a meter la niebla y no pudimos disfrutar de las vistas.
Una vez bordeado el cueto de La Cahorra iniciamos un descenso a ciegas hacia Tudanca. Esta fue la zona más complicada y teníamos que ir muy juntos ya que los niños se podían salir de la pista y perderse fácilmente. Es más en uno de los puntos decidimos hacer un recuento para comprobar que todo iba bien.
Si no hubiésemos tenido niebla en este descenso las vistas serían espectaculares, se vería en embalse de la Cohilla y al llegar al mirador de la Jorcada se podría tener una magnífica vista sobre el río Nansa, las aldeas de La Lastra, Tudanca y Santotis a nuestros pies y Peña Sagra cerrando el valle por el oeste.
Después de atravesar dos pasos canadienses, algunos desvíos a nuestra izquierda y dejar un redil para el ganado, también a nuestra izquierda llegamos a una pista hormigonada que se dirigía hacia Tudanca y donde encontramos un indicador que nos dirigía hacia el punto del que veníamos, la braña de Carracedo o a la Ermita de Virgen de las Nieves. En este punto nos dirigimos por la pista hacia la derecha en descenso a Tudanca. Allí aprovechamos para hacer una foto del grupo.
Aquí ya no hay pérdida posible, sólo hay que ir descendiendo siguiendo la pista hormigonada, la cual se dirige hacia Tudanca, la cual se puede ver entre la niebla.
Al llegar a las cercanías de Tudanca nos encontramos varios caminos que se dirigen hacia el pueblo. Cogimos el primero de ellos, el cual era bastante pindio y que se encontraba a la izquierda de la pista.
Ya en Tudanca, la “Tablanca” de José María de Pereda en la novela Peñas Arriba, fuimos a ver la conocida Casona de Tudanca, la cual actualmente es un museo y en otros tiempos la vivienda del escritor José María de Cossío, en la cual acogió en ella a numerosos escritores como Gerardo Diego, Unamuno o Alberti.
Para ver la imagen en Wikiloc pinchar sobre la imagen
Curva de tiempo-altura
Saja – Tudanca | |
Distancia Total | Ruta lineal de aproximadamente 17 km. |
Duración Total | El recorrido lo hicimos en 5 horas y media. Estuvimos parados aproximadamente 1 hora para comer y hacer fotos. |
Dificultad | La dificultad de la ruta es fácil, pero la nieve y la niebla puede dificultarla. |
Desnivel | El desnivel es de 650 m. y el acumulado de unos 850 m. en ascenso y 870 en descenso. |
Tipo de camino | Todo el camino es por pista, senderos y campo a través. |
Agua potable | Nos encontramos varios abrevaderos para el ganado en todo el camino y varios arroyos. |
Época recomendada | Se puede hacer durante todo el año, pero en invierno podemos encontrarnos nieve que dificultaría el camino así como la peligrosa niebla. También en la época de otoño-invierno nos podemos encontrar cacerías que harían imposible el hacer el camino. |
Cartografía y Bibliografía | Hoja 82-I (Tudanca) y 82-II (Los Tojos) a escala 1:25.000 del Instituto Geográfico Nacional. |
Track GPS | Enlace a track para GPS en Wikiloc |